lunes, 15 de enero de 2018

Dónde iniciar con mi Árbol Familiar

¡Qué tal, Detectives!

Bienvenidos a este tutorial.

Hoy hablaremos sobre los primeros pasos que puedes seguir para iniciar con tu árbol familiar.

Existen infinidad de datos que pueden ser agregados a nuestro árbol. Partiendo de aquellos acontecimientos como el nacimiento, el bautismo, matrimonio, el fallecimiento, etéctera, hasta aquellos logros, anécdotas, hitos o actividades que consideremos relevantes de preservar.

Algunos de estos datos vendrán acompañados de documentos y fotografías que podemos utilizar para ilustrar dicho acontecimiento. Vivimos en una era donde la tecnología es una gran aliada para este propósito, donde cualquier documento se puede digitalizar, copiar infinidad de veces y ser compartido por prácticamente todo el mundo. Las redes sociales están inundadas de imágenes, videos, eventos y comentarios propios o de familiares que tal vez querremos mantener en un lugar seguro donde podamos mantenerlas para nosotros o las siguientes generaciones por venir.

¿Se imaginan que nuestros antepasados hubieran podido conservar sus recuerdos de la manera en que nosotros podemos?

Es por ese motivo, que hoy podemos hacer diferencia y volvernos guardias y conservadores de los recuerdos que tenemos en nuestras manos. El árbol familiar, es una gran oportunidad para hacer que todos nuestros recuerdos lleguen a generaciones futuras, esperando les sean de gran utilidad.

Como es de esperarse, la primera persona por la que iniciaremos será por nosotros mismos. Eres el punto de partida de esta gran historia. Tú eres el arquitecto que diseñará el puente entre tus seres queridos vivos o recientes con los antepasados que estaremos buscando.

En breve, haremos un tutorial mostrando todos los datos básicos y adicionales que podrás agregar en Family Search. Notarás que la búsqueda de antepasados es por sí sola una labor ardua y notable, que tomará la mayoría de nuestro tiempo dedicado al árbol. Sin embargo, el reunir datos y documentos propios o familiares cercanos tiene también su nivel de complejidad, el cual, será bien recompensado no sólo por el acervo que obtendremos, sino por otro dato que tocaré más adelante.

Una vez que hayas terminado de reunir información sobre ti, debemos proseguir con nuestros parientes cercanos: Nuestros padres o cónyuge son una excelente opción. Aquí hago una breve pausa para comentar que en caso de estar casado, no podremos encontrar mejor aliado que nuestro cónyuge para esta aventura. Sin embargo, es importante considerar que cada uno tiene una carga similar al trabajar en su propia historia. Tendremos tiempo para agregar a los antepasados de nuestro cónyuge a nuestro árbol y tal vez apoyarle cuando encuentre dificultades, todo esto sin olvidar que nuestro principal enfoque es nuestra propia línea.



Terminado el trabajo con nuestros padres o cónyuge, podemos continuar con nuestros hijos, en caso que tengamos. Involucrarlos desde un inicio será una excelente idea, ya que podrán apoyarnos con la tarea en un futuro. Si alguna vez te has preguntado quién preservará los recuerdos que vayas acumulando una vez nosotros no estemos aquí, he ahí tu respuesta. Los hijos serán siempre la primera opción para continuar con esta labor.

Después de tus hijos y si tienes la fortuna de tener abuelos o bisabuelos vivos, no dudes en acudir con ellos inmediatamente. Antes comenté que había una recompensa por reunir datos de familiares cercanos. Una de ellas es sin duda el tener contacto con aquellos familiares con los que casi no hablamos. ¿Alguna vez te has sentado a preguntarle a tu abuelo o bisabuelo sobre su vida? No podemos negar que es un momento más que apreciable. Verán que en la mayoría de los casos, ellos se sentirán de maravilla al contar estas anécdotas que les harán revivir aquellos tiempos. En ellos siempre hay datos invaluables que podrás registrar y tal vez no encontrarás en otro lado, por más documentos que localices.

El propósito de este proyecto es unir familias. No pierdas la oportunidad.

Pareciera que ya tenemos todos los datos iniciales, ¿no? Los míos, los de mi cónyuge, padres, hijos, abuelos… ¿Ya puedo comenzar a buscar a mis antepasados?

Podrías, sí. Pero ¿qué hay de tus demás familiares aún vivos? Hermanos, primos, tíos, tíos abuelos, primos segundos, etc. Si eres la única persona en tu familia que se ha hecho a la tarea de preservar los recuerdos, este es un paso que querrás hacer. Los efectos secundarios son también las otras recompensas de las que hablaba. Reconectarte con tus familiares en otra ciudad o país, visitar a aquellos primos a los que no has visto recientemente, compartir anécdotas y eventos.

Recuerda que un puente no necesariamente tiene una sola entrada y una salida.

Bien, Detectives. Hasta aquí este tutorial sobre dónde comenzar tu árbol. 

Les dejo una liga a la página de Family Search donde podrán obtener más consejos sobre cómo iniciar tu árbol. 

https://www.familysearch.org/ask/gettingStarted


Hasta el próximo tutorial.


Y recuerda: El viaje más intenso de tu vida… es a través de tu Historia Familiar. 



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